sábado, 16 de enero de 2010

Gana el pollo al chilindrón


En una ocasión preparé unas croquetas de pollo y las llevé a casa de mi hermana. Pero cuando llegué le dije que era pollo al chilindrón. Por supuesto, en cuanto vieron la comida cayeron en la cuenta de mi “error”. Pero yo insistí en que aquello era pollo al chilindrón durante toda la noche, una y otra vez, no me eché atrás en ningún momento… y los que cenaron conmigo dejaron de discutirlo y me siguieron “la corriente”.

A finales de 2009, un montón de políticos y expertos se han reunido en Copenhaguen para salvar al planeta de su mayor amenaza, el ser humano. Todos ellos con la idea de ceder lo menos posible en sus intereses particulares, muchos con la idea de avanzar pero sin desbocarse demasiado, que hay mucha crisis y mucho paro, muchos con ganas de aprovechar la oportunidad… para mejorar su imagen. Hace unos años algunos políticos afirmaron que el cambio climático no era tal, que eran sospechas, exageraciones de algunos científicos, que no estaba probado, ni mucho menos… que las croquetas eran pollo al chilindrón.


Finalmente, como todas las negociaciones que se comienzan sin voluntad de acabar bien, fracasaron. Los grandes piensan que los pequeños deben hacer casi el mismo esfuerzo que ellos. Los pequeños que los grandes, que históricamente han liderado el problema, deberían liderar también la solución. Unos por otros, otros por unos, todos hemos perdido. Al final, gana el pollo al chilindrón.  Politician talk, leaders act.